
Medición del ruido interior de los vehículos
Medir el ruido interior de un vehículo es un aspecto crítico del análisis NVH (ruido, vibración y dureza) en los coches, ya que afecta directamente a la calidad y el confort de la experiencia de conducción. Para medir el ruido interior de un vehículo, se colocan micrófonos estratégicamente en su interior para captar las ondas sonoras y registrarlas como niveles de NVH. Normalmente, estas mediciones se realizan durante situaciones de conducción en tiempo real para captar un entorno acústico realista. El análisis y la evaluación de los datos recogidos son fundamentales para optimizar el rendimiento acústico del vehículo y, en última instancia, mejorar la experiencia de conducción en general.
¿Cómo se mide el ruido interior del vehículo?
A la hora de analizar y evaluar los datos NVH recogidos, entran en juego varios factores clave. Entre ellos se incluyen el tipo y la colocación precisa de los micrófonos en el vehículo, la velocidad del vehículo, las condiciones de la carretera y el nivel de ruido ambiente. El cumplimiento de unas condiciones de medición normalizadas es fundamental para garantizar unos resultados precisos y comparables.
¿Motor eléctrico frente a motor de combustión?
Tanto en los vehículos con motor de combustión interna como en los eléctricos, el confort interior y la capacidad de comunicarse con claridad son prioridades absolutas. En particular, la calidad del ruido interior se destaca a menudo como un criterio clave en la evaluación de los vehículos por parte de los clientes y está fuertemente influenciada por todas las fuentes potenciales de ruido dentro del entorno del vehículo.
El ruido interior de los vehículos incluye una mezcla de ruido del motor y la transmisión superpuesto al ruido del viento, los neumáticos, la carretera y los frenos. La llegada de los motores eléctricos trae consigo nuevos tipos de ruido, como el característico ruido de alta frecuencia procedente del inversor. Este ruido es perceptible principalmente por encima de los 5 kHz y destaca claramente sobre el ruido del viento y los neumáticos en el entorno. Este ruido de alta frecuencia puede afectar significativamente a la percepción general de la calidad del sonido para el oyente.