
Banco de pruebas de baterías
Diseño de un sistema de pruebas para baterías de iones de litio
El diseño de un sistema de pruebas para baterías de iones de litio implica la creación de un entorno de pruebas completo que también requiere un control eficaz. Por lo tanto, es esencial establecer una arquitectura integrada de hardware y software de medición para facilitar las pruebas automatizadas y el análisis de datos. El procesamiento en tiempo real y la supervisión continua de los datos de medición permiten supervisar de cerca el sistema de pruebas y, en caso necesario, interrumpirlas. Dado que estas pruebas implican mediciones multicanal en red, resulta ventajoso implementar un sistema de medición modular, en red y ampliable que pueda adaptarse a diversos escenarios de prueba. Esta flexibilidad debe incluir interfaces para una integración perfecta con dispositivos de terceros. Por ejemplo, debe ser capaz de recopilar datos de forma sincrónica sobre el estado y la temperatura actual de la cámara climática al tiempo que registra datos de temperatura y tensión del objeto de ensayo. Además, debe ser capaz de adquirir datos de vídeo de forma sincrónica. Esta recogida de datos sincronizada es especialmente importante para el posterior análisis de los datos, sobre todo en el caso de pruebas de larga duración que impliquen ciclos repetitivos de carga y descarga.
Un banco de pruebas de baterías de iones de litio es un equipo especializado empleado para evaluar el rendimiento de las baterías de iones de litio, incluidas las utilizadas en vehículos eléctricos. Aunque el diseño específico y las funcionalidades pueden variar según el fabricante y la aplicación, un banco de pruebas de baterías se caracteriza por varios rasgos comunes. La cámara de pruebas sirve como entorno de pruebas para la batería, manteniendo unas condiciones controladas que simulan los escenarios del mundo real, incluido el control de la temperatura y la humedad. El banco de pruebas incluye la capacidad de medir la tensión y la corriente, lo que facilita la supervisión en tiempo real de los parámetros eléctricos de la batería. Esta función es crucial para controlar las corrientes de carga y descarga, así como los niveles de tensión. Se emplea un sistema de adquisición de datos para recopilar y registrar datos durante todo el proceso de prueba de la batería. Abarca varios componentes, como sensores, registradores de datos y software, para capturar y analizar parámetros como la tensión, la corriente, la temperatura y la capacidad.
Los bancos de pruebas de baterías integran mecanismos de seguridad para garantizar un funcionamiento seguro durante las pruebas. Estas características pueden incluir protecciones contra sobrecorriente, cortocircuitos, sistemas de gestión térmica y protocolos de apagado de emergencia. El banco de pruebas está equipado con un sistema de control y supervisión que permite a los operadores definir los parámetros de las pruebas, supervisar su progreso y realizar los ajustes necesarios. Este sistema incluye una interfaz de usuario, software de control e interfaces de comunicación para el intercambio de datos. Los bancos de pruebas de baterías suelen venir con algoritmos y protocolos de prueba preprogramados diseñados para diversos tipos de pruebas, como pruebas de capacidad, pruebas de ciclo de vida y pruebas de carga rápida. Estos algoritmos incorporados garantizan procedimientos de prueba estandarizados y repetibles.
Algunos bancos de pruebas de baterías ofrecen flexibilidad y opciones de personalización para adaptarse a baterías de distintos tamaños, composiciones químicas y requisitos de ensayo. Esta adaptabilidad permite probar varias baterías de iones de litio utilizadas en vehículos eléctricos, atendiendo a diversas necesidades y especificaciones. Cabe señalar que las características y capacidades exactas de un banco de pruebas para baterías de iones de litio pueden variar en función de la aplicación prevista, el presupuesto y las exigencias específicas del centro de pruebas.